Elegir correctamente los colores en el taller puede atraer más clientes

Los talleres que pertenecen a una red tienen una identidad de marca que seguir, que establecerá los colores de su establecimiento. En cambio, los multimarca tienen la libertad (y responsabilidad) de escoger la estética de su taller.

Simplificando mucho, la psicología del color asocia a cada uno de ellos una sensación, lo que debe tenerse en cuenta para elegir el color que predomine en el taller, en función de lo que queramos expresar al cliente. Según la empresa Color Marketing Group, el color está detrás de cerca del 85% de las decisiones de compra.

Guía rápida para escoger el color predominante en el taller

De este modo, es importante plantearse cuáles son los valores por el que el taller destaca respecto a los competidores, y tratar de plasmarlos en la estética del centro. Los significados más generalizados de los principales colores son:

• Azul: seguridad
• Rojo: energía
• Naranja: sociabilidad
• Amarillo: optimismo
• Verde: frescura
• Violeta: creatividad
• Negro: sofisticación
• Multicolor: audacia
• Dorado: lujo

El dorado vuelve a estar de moda: ¿es una buena idea aplicarlo en el taller?

Idolatrado en los años 80 y desdeñado en los 90 por hortera, el color dorado nunca ha dejado de asociarse al lujo y al dinero. En un momento en que los consumidores desean dar por superada la crisis, el dorado vuelve con fuerza como símbolo de estatus. Además, los expertos aseguran que el uso del dorado anima a los clientes a comprar y gastar más.

De este modo, un entorno en el que este color esté presente hace que el cliente se sienta más rico y, en consecuencia, esté dispuesto a ser más generoso en su gasto. Tampoco hay que olvidar que las tarjetas de crédito con mayor límite de gasto suelen tener este color. Por ello, marcas y empresas están recuperando el dorado en sus productos, en sus embalajes y hasta en sus puntos de venta.

El dorado no se asocia tradicionalmente a la automoción; aun así, introducir algunos elementos en este tono puede contribuir a dar una imagen de refinamiento.

La automoción no es ajena a este revival del oro. Así, Axalta elegía el Sahara, un tono bronce dorado, como color del año, por su asociación con la “calidez, riqueza y fuerza”. El dorado no se asocia tradicionalmente a la automoción, a diferencia de colores como el azul o el gris, por lo que un taller decorado con prevalencia de dorados puede resultar chocante. Aun así, introducir algunos elementos en este tono puede contribuir a dar una imagen de refinamiento y poderío económico que atraiga a los clientes.